¡Nos vamos a la(s) cama(s)! (1 de....)

Una de las dudas más grandes que tienen los participantes en la Transibérica es, ¿dónde vamos a dormir? Este ha sido el trabajo de esta semana: buscar y encontrar los lugares dónde nos quedaremos para evitar escenas así...

Cuando empecé la planificación de la Ruta, encontré dos retos: garantizar pasar por lugares con alojamiento; y, segundo, saber que los lugares tendrían una variedad de opciones de alojamiento. Los campings y los albergues juveniles nos da mucha flexibilidad si, por acaso, el grupo crece mucho y se hace muy grande. En los albergues y los campings, sabemos que no nos van a poner pegas por llegar en un grupo grande. Pero hay limitaciones. No todos los ciclistas somos aficionados de hacer acampada, y seguro que habrá dias cuando vamos a querer camas y duchas calientes depués de montar.

Al mismo tiempo, ningún de nosotros somos forradísimos. Pasar un mes entero en bicicleta significará gastos de 350€, al mínimo (y confieso que esta puede resultar una cifra conservadora.) Así que habrá la necesidad de planficar bien los gastos, para no estropear nuestros monederos; también ayudaría poder cocinar en grupo. Aunque resulta más cómodo, ¡creo que no habrá nadie que va a querer sobrevivir exclusivamente de comidas y cenas de restaurantes por seis semanas! Es una gozada poder cocinar mientras estamos de viaje, y quedarnos en albergues juveniles y campings nos otorga más libertad hacerlo.

Así que lo que pretendo hacer es alcanzar una buena mezcla de opciones y alojamientos. Donde haya, nos acamparemos (¡ojo! Acampar NO es obligatorio - los pueblos donde hay campings también tienen otras opciones.) En el artículo de domingo, os daré una lista de las opciones que tenemos, y donde nos quedaremos, cuando.